Este mes tuvimos la oportunidad de probar el nuevo Audi Q5 2.0 TDI 163 CV 400 Nmquattro-ultra S-tronic 7 velocidades, cedido por Grupo Talleres Manchegos de Alcázar de San Juan, para realizar una prueba dinámica.

La conducción fue tanto por carretera como por caminos, dejándonos muy buenas sensaciones en cuanto a confort, equipamiento y calidad.

La primera impresión que provoca este Audi Q5 es que estamos ante un SUV potente y deportivo, con unas líneas de diseño más rectas que su predecesor incorporando la ya conocida parrilla frontal singleframe de Audi así como los nuevos faros Xenon plus, que le añaden un punto más musculoso.

Nada más ponernos al volante se sabe que estamos a bordo de un Audi, todos los mandos del habitáculo quedan muy a mano del conductor así como muy ordenados, siendo muy fácil la configuración de todos los ajustes de conducción de los que dispone. De la consola central sobresale una pantalla de 7 pulgadas multifunción en la que se aloja toda la información y reglajes del vehículo, así como el acertado navegador MMI plus 3D.

En el interior es todo un mar de silencios, la elección de los materiales empleados y su ensamblaje de altísima calidad, provocan que el ruido no exista, sus acabados enamoran tanto a la vista como al tacto en nuestra primera toma de contacto. Los espacios delanteros y traseros de los asientos están perfectamente calculados para disfrutar de una comodidad extrema.

En el apartado del maletero nos llama la atención de la capacidad de carga con unos sorprendentes 550 litros. Si abatimos la segunda fila de asientos el volumen de carga aumenta hasta los 1.550 litros.

Una vez que nos ponemos en marcha las dudas de si un coche de tales dimensiones y peso (aligerado en 90 kg respecto a su predecesor) podría comportarse de una manera ágil en los distintos terrenos que ha sido probado se disipan y constatamos que dicha conducción es más que dinámica.

Pudiendo elegir entre múltiples opciones de conducción, el método elegido en la mayoría de kilómetros ha sido el modo Auto, (si te molestan los resaltos en ciudad opta por elegir el modo Confort y prácticamente no los notarás, eso es debido a la nueva suspensión neumática adaptativa incorporada en este nuevo Audi Q5). Una vez puestos al volante en carretera tenemos ante nosotros un vehículo capaz de darnos la potencia y agilidad extra que le pidamos en todo momento con solo dar un pequeño toque a la cómoda y ergonómica palanca de cambios o bien utilizando las accesibles y bien situadas levas del volante.