Siempre que las circunstancias y los compromisos le dejan viene a Ciudad Real, donde tiene una casa más grande, a sus amigos de toda la vida y su gimnasio, pero no para de viajar a Madrid, a festivales de cine o a distintas localizaciones de rodaje. Daniel Chamorro es un todoterreno del cine que comenzó ya en la Facultad de Ciencias de la Información de la Complutense -donde estudió Comunicación Audiovisual- a hacer trabajos de realización, producción, continuando con cursos de interpretación, guiones, cortometrajes, composición de videoclips y un grupo de música con el que gira, ¿cuál? Esa es otra historia, da para otra entrevista, confiesa Daniel, con el que es imposible no reírse.

“Uno es bueno en lo que ama, si amas ser actor lo harás todos los días y serás bueno”

Pregunta.- Daniel, eres director, productor, guionista, actor, compositor, escritor y poeta, ¿alguna ocupación más que nos hayamos dejado?
Respuesta.-
Gogó, no, no, (risas). Cuando alguien es artista suele trabajar en diversas áreas, aunque lo normal es que la actividad principal sea una o dos, en mi caso soy más actor y director de cine que otra cosa. Lo que ocurre es que para dirigir hay que producir, y lo de ser actor es mi debilidad. De vez en cuando también compongo alguna banda sonora de mis cortos, con los que he obtenido algún premio; también escribo mis propios trabajos… Realmente, soy más cineasta que artista multidisciplinar, me gusta el cine y le doy a los palos que me dejan.


P.- La Junta de Comunidades está apostando por el cine y la realización de películas en escenarios de Castilla-La Mancha, ¿cómo ves la producción cinematográfica en la región?
R.-
Soy miembro de Apacam, la Asociación de Productores de Castilla-La Mancha, y llevamos muchos años luchando por un mayor apoyo al cine en la región. Con las recientes crisis, lo primero que se ha sacrificado ha sido la cultura, parece un sector menos esencial, pero no es cierto, la riqueza de una sociedad se mide a través de sus conocimientos y de su cultura. En Castilla-La Mancha es complicado, aunque se intente apoyar el cine siempre faltan recursos de música, imagen, sonido, interpretación…, porque cada película es un milagro.


P.-Has tenido inquietudes cinematográficas desde bien joven ¿no?
R.-
Cuando la gente dice que alguien tiene talento, creo que en realidad es entrenamiento. Yo llevaba toda la vida haciendo el idiota en casa, soy una persona que me gusta hacer reír a los demás, y es cuando calibras lo que es gracioso y lo que no; te equivocas, fracasas, tienes éxito. De alguna manera interiorizas cómo hacer reír, cómo hacer feliz a la gente y cómo interpretar personajes. Uno es bueno en lo que ama, si amas ser actor lo harás todos los días y serás bueno; si tú amas escribir, lo harás todos los días y serás buena, no tanto por talento sino por entrenamiento y amor.


P.- ¿Y cómo te has formado, has llegado a estar con monstruos de la gran pantalla como Pacino?
R.-
Mi maestro y mi padre creativo en Los Ángeles es Bernard Hiller (coach que entrena a los mejores artistas de Hollywood). Él me ha ayudado, me ha traído muchas alegrías en mi profesión y muchos de estos grandes actores y actrices estaban en sus clases, entre ellos Al Pacino. Cuando hablas con él, te das cuenta de que es una persona de carne y hueso. Por eso, siempre pienso que, aunque vivamos en Ciudad Real, una pequeña ciudad, todo el mundo puede llegar a donde se proponga con un poco de esfuerzo y suerte. Poder estar cerca de estos personajes te ayuda a creer en los sueños.


P.- Más de 15 cortos, dos documentales, has actuado en películas tan nominadas como Akelarre (2020), El buen patrón (2021), también En los márgenes (2022). Con este bagaje, ¿te gustaría conseguir un premio Goya?
R.-
Mi motivación principal es la creatividad. No busco desesperadamente un premio, nunca he perseguido un Goya, no creo que sea un fin sino algo coyuntural, por tener uno no significa que seas peor o mejor. Pero esto no quita para decirte que me haría muchísima ilusión ganarlo, porque es evidente que facilita la promoción de la industria del cine, el aumento de público en las salas de cine y seguramente en el hecho de que la carrera de las actrices o actores premiados se dispare.


P.- También has estado en televisión, con Los hombres de Paco, El Ministerio del Tiempo…
R.-
He sido muy afortunado desde el inicio de mi carrera, porque he trabajado con directoras y directores muy buenos, como Mariano Barroso (en tres series); Miguel Bardem y Fernando Truyols, regidores de la serie Bosé; Marc Vigil… El hecho de haber empezado con los mejores trabajando y en series de primer nivel, puede dar un poco de vértigo, pero a la vez demuestra que he estado aprendiendo y trabajando mucho. Ojalá siga teniendo suerte y el teléfono siga sonando.


P.- ¿Has estado en Hollywood o en los Oscar?
R.-
En los Oscar no, pero sí he hablado con artistas hollywoodienses y he estado en fiestas de cine allá. Te diría que son personas, con sus cosas buenas y malas, sus inseguridades, sus talentos… Es curioso pero muchas veces te valoran más que en España; cuesta tanto aquí, mientras que en Los Ángeles era un alumno destacado en clase.


P.- ¿Qué dirías a jóvenes con tus inquietudes?
R.-
Que pongan un pie en Madrid donde hay más oportunidades y si tienen ocasión de viajar a Los Ángeles, también. Pero si no pueden irse, que se formen con cursos y, sobre todo, que estén activos, grabando cortos, que aprendan a base de intentarlo y de equivocarse, que no se preocupen si sale mal. El asunto del fracaso y el error se ha convertido en algo muy dañino cuando creo que es parte del camino. Nelson Mandela decía: “Yo nunca pierdo, sólo gano o aprendo” y tenía razón. Es cuestión de seguir adelante, la carrera de cineasta tiene muchos altibajos, con momentos muy buenos y otros peores donde hay que reinventarse, pero hay que seguir, aunque tengas que trabajar en otras ocupaciones. Entre los actores, el paro es del 91% y se ven obligados a trabajar como camarero o lo que sea, aunque siempre vuelven al séptimo arte porque es su pasión.


P.- ¿Con qué estás ahora Daniel?
R.-
Estoy rodando la película Escape, dirigida por Rodrigo Cortés y producida por Martin Scorsese. Está protagonizada por Mario Casas y Anna Castillo; trata de un joven que quiere vivir entre rejas y hará todo lo necesario para conseguirlo. Antes, hice una serie en Barcelona; he estrenado Bosé; salgo en el reparto de Un largo viaje, con Elisabet Gelabert, Christian Checa…, película intimista, dura, pero muy buena. También he rodado en Cuenca La canción del verano, donde hice un personaje de comedia tremendamente divertido, no descarto que hagan un spin off. Además, estoy preparando un largo como actor y director, y otros proyectos.


P.- ¿Cuáles son los temas que más te motivan, no te atrae el mundo de la crispación actual?
R.-
En mis cortos he hablado de vejez, de soledad, de muerte, de obsesiones, de abandonos, de la mujer, mucho sobre el amor, pero siempre desde el punto de vista del humor y la bondad. Me gusta más lo humanista que lo político, la crispación actual la incluyo en el mundo del miedo pero yo prefiero el amor, el lado positivo de la vida; son dos fuerzas contrarias aunque necesarias.

P.- Un cineasta que te inspire…
R.-
Steven Spielberg es el que más me ha inspirado. Es poner pelis de Spielberg con John Williams a la batuta y emocionarme de inmediato. Todo lo que se ramifique con Spielberg, sea Zemeckis, Silvestri o cineastas de su cuerda como J.J. Abrams, me gusta, sobre todo por la magia que transmiten.


P.- ¿Y español?
R.-
Me gustaba mucho Amenábar cuando era punta de lanza. Ahora han llegado otros que se han situado a la par como Rodrigo Sorogoyen, Mariano Barroso, Fernando León de Aranoa, Julio Médem, Pedro Almodóvar… He trabajado con varios de ellos, pero todos me inspiran y de todos aprendo.


P.- ¿Y un actor/actriz internacional y nacional?
R.-
Del panorama internacional me gusta mucho Meryl Streep, Al Pacino o Kate Winslet; Sacha Baron Cohen me encanta, es actor de comedia, pero es muy difícil lo que hace y muy divertido. De España me decanto sin pestañear por Javier Bardem, ha sido un privilegio trabajar con él en El buen patrón; Antonio Banderas o Emma Suárez, es un ángel como persona y como actriz, trabajamos juntos en Criminal; con Penélope Cruz no he trabajado y me encantaría poder hacerlo.

Texto y fotos: Oliva Carretero Ruiz