Si Mahoma no va a la montaña, la montaña… Es lo que se ha propuesto este año Alvar Vielsa y su equipo en la decimoquinta edición del Festival de Cine Español Emergente (FECICAM) que se celebrará en Ciudad Real del 27 de septiembre al 4 de octubre. Un certamen más abierto, con actividades paralelas de todo tipo y con la misma calidad de siempre, intentando atraer a todos los públicos a la gran fiesta del cine en la ciudad. Proyecciones, doblaje de escenas, monólogos, conciertos, rutas gastronómicas y un largo etcétera. Sin duda, una experiencia cultural de primerísimo orden de recomendada asistencia.
“En esta 15ª edición apostaremos por acercar el festival al público, por llevarlo a pie de calle”
Pregunta.- ¿Qué balance haces de estos quince años de FECICAM?
Respuesta.- Quince años de gran acogida y éxitos, y de forma ininterrumpida. La pandemia nos lo puso muy difícil y fue muy complicado poder celebrar la edición de 2020. Recuerdo que cuando concluyó el confinamiento, presentamos un plan de contención a Sanidad y lo pudimos celebrar en la sala de cine Las Vías. El festival fue tanto presencial como online, colgamos en la red las obras finalistas y la gala se retransmitió virtualmente, todavía no se podía viajar entre comunidades autónomas.
Tras aquello, FECICAM cambió de escenario al antiguo Casino de Ciudad Real ya que el teatro Quijano estaba en proceso de remodelación, viéndose reducido a un formato muy pequeño.
Además, últimamente hemos apreciado que el público no responde a las proyecciones o sesiones presenciales de las películas como al principio del certamen. Creo que es lógico, a raíz de la pandemia las plataformas televisivas han crecido sobremanera, ha cambiado el escenario y esos cambios han venido para quedarse.
P.- Entonces, ¿cómo os planteáis esta edición?
R.- Esta edición transcurrirá del 27 de septiembre al 4 de octubre próximos. Vamos a focalizar nuestros esfuerzos en la recta final del Fecicam en el Quijano y en la gala de clausura. Durante los tres últimos días, el 2, 3 y 4 de octubre, se hará la presentación de cuatro grandes películas como preestrenos nacionales. Asimismo, la clausura recuperará su formato original, con la invitación a grandes artistas; será un acto divertido abierto al público en el que se podrá disfrutar de humor, danza, música y de la entrega de premios. Recuerdo que Emilio Gavira, en nuestra séptima edición, nos dijo: “A muchos festivales les gustaría tener una gala como la vuestra”. Vamos a apostar por eso y por acercar el festival al público, llevarlo a pie de calle.
P.- A nivel de calidad, ¿en qué posición se sitúa FECICAM en Castilla-La Mancha?
R.- Encabezamos los primeros puestos junto a otros festivales de Castilla-La Mancha, como Abycine en Albacete, o Cibra en Toledo, ambos están ubicados en ciudades turísticas y fueron apadrinados por su ayuntamiento; nosotros, en cambio, nos encontramos en un territorio muy hostil como es Ciudad Real, nacimos con un carácter independiente y no contamos con un padrino institucional.
FECICAM sigue siendo un festival independiente, nacimos como una necesidad, la gente local de Ciudad Real y la región carecía de una plataforma donde exhibir sus cortos porque competíamos a nivel nacional en todos los festivales. FECICAM sentó cátedra porque abrió la excepción hecha en C-LM en el resto de festivales de la zona. Sin embargo, después de 10 años siendo un festival exclusivamente de C-LM y para C-LM se quedaba en bucle, era muy repetitivo, premiando a los mismos directores y directoras año tras año. Queríamos abrir el campo y aprovechar esa naturaleza de festival de cine joven, de directores revelación y emergentes, para abrirnos a nivel nacional sin perder el presupuesto ni los premios de la comunidad.
Ahora, buscamos el apoyo del ICAA (Instituto de la Cinematografía), del Ministerio de Cultura. También hemos creado alianzas y colaboradores nacionales como la Academia de Cine de Andalucía, la Plataforma Nuevos Realizadores o la Asociación de Montadoras y Montadores de España.
P.- De 2009 a la actualidad, ¿cómo ha cambiado la producción cinematográfica en C-LM?
R.- Ha ido a más, ha habido mucha colaboración por parte de las instituciones, de la Consejería de Cultura, junto a Apacam… Con la pandemia, su intención fue no retirar ningún tipo de ayuda para que no desapareciera ningún festival, también la Diputación -con ayudas específicas y nominativas a los festivales de mayor duración- y el Ayuntamiento de Ciudad Real -a través de Cultura- nos han mantenido el apoyo, sin parones. Ahora, en producción audiovisual se ha implantado una serie de ayudas a la producción de cortos o largometrajes, al desarrollo de guiones o al de festivales en Castilla-La Mancha, no con la dotación de otras regiones, pero es un punto de partida para empezar a trabajar.
P.- ¿Qué objetivos esperáis conseguir y qué novedades trae esta decimoquinta edición?
R.- Confío en una mayor participación de público, en poder involucrar a toda la ciudad, ya que la calidad de Fecicam está contrastada en estos 15 años de andadura. Habrá algunas novedades como la iniciativa ‘Desmontando’ en el que miembros de la Asociación de Montadores y Montadoras de España descubrirán cómo se ha hecho el montaje de una película importante. Además, se han previsto actividades en la calle, conciertos, monólogos, doblaje de escenas de películas y ruta gastronómica por bares. En definitiva, será una semana grande del cine en la que, aparte de ver proyecciones, existirán otros eventos vinculados al Fecicam. Quiero recuperar también las presentaciones fuera de concurso, es una pequeña selección que merece un espacio y nuestro apoyo.
Bajaremos la entrada simbólica y daremos entradas gratuitas a colectivos, asociaciones, usuarios de las bibliotecas públicas y a los estudiantes. Quiero que el público conozca el festival; estos 4 últimos años nos hemos preocupado más de salvar el festival y la calidad del mismo que en ofrecerlo a todos los públicos.
P.- Aparte del festival, ¿qué otros proyectos tienes entre manos?
R.- Ahora estamos promocionando el corto de animación Antes de morir, la sombra del Wendigo, hecho en Ciudad Real, con idea y guion de Carlos Wallas, dirección mía, música de Ángel Arévalo ‘el Fandi’ y Wallas, producción de Patricia González y Beatriz Gómez de la Cueva, y diseño y créditos de Ángel Mata. Está como los mejores cortos del año, estamos compitiendo por el Goya a la mejor animación. Y todo está hecho en Ciudad Real, hay un gran equipo detrás, además se involucraron empresas e instituciones en un crowdfunding, y el productor del SueñoEternoPictures Enrique Fernández se adhirió a este trabajo y pudimos acabar la animación. A mí me atrajo desde el primer momento.
P.- Cuéntame un poco más sobre este corto…
R.- Es una animación en 2D tradicional, en blanco y negro con tintas rojas. Los personajes son manga, pero la historia está desarrollada dentro de un western americano sobre la leyenda del Wendigo, de los indios de Canadá. El estreno fue en el festival de Málaga, hemos ido al Skyline de Benidorm, tenemos once selecciones más y con ello presentaremos la candidatura a los Goya. Estamos muy contentos de que Ciudad Real haya hecho una animación tan cara y de esas características. En cine Las Vías se presentó en julio de 2023 y luego en Fecicam. Es mi primer corto desde 2013.
P.- ¿Por qué te atrajo este corto de animación desde el primer momento?
R.- Me pareció un guion súper interesante e innovador. Estoy cansado de ver cortos muy tematizados y encasillados en el tema social, está bien reivindicar el tema de maltrato, bullying, racismo… pero también me gustan cortos originales de fantasía, que sean totalmente creativos, que investiguen otros mundos, otros universos. Por ello, cuando lo leí me pareció soberbio, donde se rescata la figura del Wendigo, algo que no conocía, y además se mezclaban dos técnicas de animación: el manga japonés y la animación americana, con la tradicional. En los festivales y coloquios se hacen preguntas sobre nosotros. En el mundo del corto se necesita gente que se atreva a contar otras cosas, a imaginar otros mundos fantásticos o a mezclar diferentes géneros.
Texto y fotos: O.C.R.