La Navidad es una época en la que casi todo el mundo adorna su casa con el objeto de pasar una temporada acogedora en compañía de sus seres queridos. Desde ahora los centros comerciales y las tiendas exponen los elementos necesarios para darle a los hogares el toque navideño que necesitan para estos dos meses. Estos elementos nos pueden encajar en diferentes tendencias.
Si hablamos de un estilo minimalista el espacio es el protagonista: espacios despejados, con extrema simplicidad, líneas puras y colores neutros, en un ambiente equilibrado y en armonía. Un diseño minimalista siempre expresa modernidad y vanguardia. Para lograrlo se debe dar protagonismo al espacio más que al objeto.
Modernidad, geometría o vanguardia. Esta tendencia es muy visual, y podemos adaptarla a cualquier espacio o mueble de nuestra casa, es fácil que invada paredes suelos y techos, ya que con una simple sucesión de formas se puede conseguir buenos resultados. Utilizar esferas, elementos decorativos navideños con formas geométricas es una variante en interiorismo que aporta modernidad. La vanguardia se define como algo novedoso que sentará las bases del desarrollo en el futuro, supone una renovación de formas y contenidos, aporta modernidad, tecnología y, sobre todo, comodidad en el hogar con espacios amplios y luminosos, a través de líneas sencillas y formas simples.
Otra tendencia sería la calidez, elegancia y lujo a través del color. Detalles escarlatas, monocromático o tonos metálicos. En Navidad el escarlata suele estar presente en todas partes, es el color que demuestra pasión, amor y está ligado con los impulsos. Si se utiliza en pequeños detalles brinda gran calidez, aunque no es recomendable su uso como color general en zonas de descanso. En nuestro hogar lo ideal es hacer una decoración navideña sin excesos. Los acabados metálicos, aportan multitud de posibilidades al interiorismo, aportan valor y calidad de lujo.
Si combinamos el pensamiento ecológico con el diseño de interiores, iremos en busca de la utilización de materiales naturales, de productos amigables con el medio ambiente, con la reutilización de productos, y volveremos a los procesos y métodos artesanos, a lo hecho a mano.
El orgánico se aleja del convencionalismo para acercarse a una obra escultural, que aporta un intenso torrente estético. Se busca liberar la forma y eliminar todo lo necesario para dar lugar a un diseño sencillo y formas cautivadoras. Se basa en un enfoque humanista del diseño, la interconexión y el espíritu de la naturaleza son la base, las curvas suaves y sinuosas frente al geometrismo y la línea.
Lo importante es lograr juntar los elementos realmente diferentes y que realicen una armonía perfecta. Estas recomendaciones, si se utilizan de forma adecuada, ayudaran a crear espacios distintos, modernos y atrevidos, siempre con la calidez de la temporada navideña.
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